Nos encanta vernos bronceadas pero si quieres evitar quemaduras y disfrutar del sol sin riesgos aplica estos diez mandamientos antes de exponernos al astro rey. ¡Toma nota!
1. Correcta aplicación. Debes aplicarte el protector solar unos 30 minutos antes de exponerte al sol, es decir, siempre en casa. Nunca en la playa o la piscina.
2. Horario ideal. Evita los baños de sol cuando las radiaciones solares son más fuertes (entre las 13 y las 17 horas).
3. Fotoprotector alto. Escoge una crema de protección solar alta FPS 30-50 o muy alta FPS 50+. Ojo, ¡durante todo el año!
4. Evitar el uso de colonias y desodorantes. El uso de fragancias antes del bronceado pueden producir alergia y manchas en la piel.
5. Dieta rica en frutas y verduras. Consume alimentos ricos en betacarotenos (zanahoria, tomates, calabaza…) para lograr un bronceado duradero y saludable.
6. Hidrátate. Además de cuidarnos por fuera, también es fundamental hacerlo por dentro. Debemos tomar mucha agua para que el sol no nos deshidrate.
7. Bronceado uniforme. Para conseguir un bronceado uniforme, es esencial tener la piel limpia e hidratada, por eso antes de tomar el sol hay que exfoliarse bien la piel para asegurar un bronceado perfecto.
8. Especial atención a las zonas sensibles. Dedica atención a zonas como el rostro,la nariz, los párpados, los labios, el escote y el pecho.
10. El ritual postsolar. Si quieres que te dure el bronceado y no acabes pelada el after-sun es tu solución. Calman la irritación y el picor producido por la exposición al sol, hidratan, nutren y reparan los daños que te hayan causado el sol.
Images: Avene, Finca Cortesin
