¡Buenos días! ¿Cómo estáis por aquí? Os escribo viendo la serie de Telecinco ‘Perdóname, Señor’. Cuando escribo el post me gusta estar tranquila y en silencio pero confieso, que aunque ya haya visto mucho 😉 en el visionado que tuvimos en la cadena, no puedo dejar de verla.
Entre que Jesús Castro es un bombón, que Paz Vega ha ganado infinitamente interpretando y que la trama es apasionante… estoy pegadísima a la tele. Además cuando vives una historia tan de cerca al haber estado con los personajes y te lo han explicado todo tan bien como que lo ves de manera diferente. Eso me parece una suerte si lo que quieres… ¡es engancharte a una serie!
Os lo dejé explicado en un post para que lo sintierais como yo, con las palabras es la única manera que os puedo hacer llegar un poquito mis experiencias, espero explicarme bien porque hay cosas o sitios que a mí me parece que valen mucho la pena (no hablo de este en concreto sino en general). Independientemente de esto, que a quien no le haya gustado la serie o simplemente no la haya visto se estará aburriendo… ¿sois de ver mucho la tele? Yo sinceramente no pero bueno me gustaría engancharme a esta serie… antes veía varias cosas y ahora nada me convence.
¿Os acordáis cuando antes veíamos varias series a la semana? Que si Médico de Familia, Periodistas, Los Serrano… La que quiero ver sí o sí son ‘Las chicas del cable’ en Netflix, estoy pensando en pagar la cuota es súper poquito y hay grandes producciones.
Lo que os decía que cambiando de tema, la ‘pared’ del post de hoy… la que tantas y tantas veces me he hecho las fotos… no la volveréis a ver más con todo el dolor de mi corazón, me encantaba ese sitio. Esta cerquita de casa y aunque en las fotos nunca se ve… había una casa preciosa con unas escaleras antiguas que impresionaban. Un jardín espectacular pero abandonado, estaba todo muy en ruinas y esa pared siempre me pareció especial. Peeeero ahora la están tirando para hacer unas villas así que la próxima vez que pase… la pared ya no estará.
Ojalá os hubiese enseñado todo alguna vez porque era increíble. Así que no por esto que es un tontería pero la conclusión final es que no dejéis de hacer nunca lo que queréis en ese momento, no os quedéis con las ganas de nada. El look de hoy está un poco apañado. Realmente la falda llevaba unos tirantes que al final no me gustaba como quedaban y los quité porque llevan botones y se los puse al capazo a modo de lazo ¿qué os parece? Es de Mango, camisa Zara y capazo Maisons du Monde. Mil besos en el corazón, mañana más.






