Lo ha vuelto a hacer. Ágatha no ha dejado indiferente a nadie y ha puesto a todo el público asistente a su desfile en pie.
¿El motivo? Una gran bandera de España como escenario, cubriendo la alfombra sobra la que desfilaban las modelos y la primera de ellas con un vestido de la bandera nacional caminaba mientras sonaba el himno de España. Tal patriotismo ha arrancado los aplausos del público que se ha enloquecido aplaudiendo la reivindicación.
Ágatha Ruiz de la Prada vuelve a la pasarela con varios as de corazones en las mangas. Esta colección otoño/invierno 2018-2019 es apoteósica y a la vez muy accesible para la persona normal.
Un extenso homenaje a Yves Saint Laurent (otro de los grandes ídolos creativos de Agatha, otra de las inspiraciones, después de Balenciaga) con prendas practicas y eternamente chics. Tal es la elegancia y relevancia de los grandes, difícil de olvidar.
La pana es el material estrella de la colección, aparece en trajes, en faldas y en vestidos. El icónico traje de chaqueta femenino se ve resucitado en múltiples variaciones, en crepe de lana, en pana, en lentejuelas. El terciopelo se ve mezclado con la poli-piel y los plásticos, las sedas con las lentejuelas y el popelín de algodón.
Los hombros son gigantescos, al igual que las camisas. Las cinturas ceñidas y los largos por debajo de la rodilla. Enormes lazos y mangas, toques indiscutiblemente agathistas, decoraran los vestidos de cóctel.
Todo esto ha sido gracias a un arduo trabajo de investigación del taller Agatha Ruiz de la Prada, que ha perfeccionado minuciosamente nuevos patrones, particularmente aquellos de esmoquin cuyos pantalones son todo un hito de construcción.
Todas las prendas de esta temporada resultan una tentación invernal, pensaras que no podrás vivir sin llevártelas a casa ni unos meses mas.
Fotos Backstage: Living Backstage
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