¡Buenos días! ¿Cómo ha ido el fin de semana? Yo como diría Mafalda bastante despeinada. ¡O Alejandro Sanz! Que me queda muy poquito para verlo y en su tour no para de repetir eso de “no se peinen mucho”. Así estoy pasando los días, aunque eso implique que no salga tan decente por aquí jaja! Pero en esta vida hay que despeinarse y más si estamos en verano. Además domar el pelo en la playa es como imposible.
Por muuuuuuchos artículos que leas de gominas milagro and co, si se te ha de rizar se te va a rizar igual. La que lo pueda domar que me cuente el secreto. Yo tengo unos caracolitos bastante curiosos. Soy un poco león de la Metro y no me los quito en todos los días en los que estoy por aquí. He probado de todo y nada me lo deja como cuando salgo de casa. La humedad del mar es lo que tiene y lo que va fenomenal es una coletita con un poco de cera y listo.
Hoy como veréis os enseño un look que de alguna manera ya ha salido en el blog. Entre sí y no anda la cosa. Es de Zara y lo vi muy muy a principio de temporada. Tanto es así que aún llevábamos abrigo y me lo puse con un vaquero. El caso es que es un vestido pero debajo lleva pantalón así que nadie me pregunte como lo puse porque ni idea. Lo más probable es que liara alguna para ponérmelo sí o sí porque cuando algo se me mete entre ceja y ceja soy terrible.
Muy aragonesa aunque no me sienta para nada de Aragón. Llevamos fama de cabezotas y yo lo soy mucho. Hasta que no sale algo no paro, me puedo quedar tres días sin dormir pero lo saco. Como cuando dije que en verano no haría todos los días blog y aquí sigo jajaj! Y seguiré… pues menuda soy para parar… incombustible. De aquí del tirón hasta el verano que viene. Mil besos en el corazón, mañana más.








