¡Buenos días! Último look de montaña. Se acabó. Por lo menos hasta el verano dejo mis escapadas al Pirineo y me instalo en modo ciudad y playa. Más ciudad que playa obviamente porque de momento aún falta un poquito hasta las naciones de verano. Pero el tiempo va que vuela eso tampoco lo podemos olvidar así que pronto me veo haciendo la selección de bikinis y bañadores. Pero como os digo este es el último que tenía reservado y la verdad me apetecía dar carpetazo al invierno.
Lo he puesto porque hoy en Madrid está un poco feo el día y pega bastante aparecer con botas. Ya os conté el otro día que al final me decidí a comprarlas y ahora ya toca guardarlas para el año que viene. Estoy contenta porque ha sido buena inversión y no pasan de moda. El otro día me llamó una amiga y me dijo ¡pero Jarita! qué haces tú con esas botas… Pues obvio no son para Madrid aunque la gente las lleve pero sí son perfectas para el lugar en el que estoy. Respeto las opiniones de cada uno de llevarlas donde les dé la gana pero personalmente pienso que para la ciudad no pegan nada. Es como si te pones de boda para ir a trabajar un jueves. Vale que tengas el subido de arreglarte pero chica. Toca ir a la oficina.
En fin que creo que muchas me entendéis cuando digo esto. Sin más que decir por hoy salvo que afronto una semana con mil cosas como siempre y que el viernes os hago balance. ¡Ah! Y se me olvidaba… hoy llevo mi súper sudadera de Elle. Si no la compro reviento, me encantó para estas ocasiones. Es de Zara, las botas de Ugg, pantalones de Zara, sombrero hecho por mí y bolso Purificación García. Hasta la próxima Pirineo. Desde ya en moda cosmopolita y vuelta a mi adorado tacón. Presentaciones, eventos, ruedas de prensa… que bonito vivir. Mil besos en el corazón, mañana más.
