¡Buenos días! ¿Cómo habéis pasado este fin de semana tan soleado? Yo lo quería pasar escribiendo ¡tengo que terminar el libro como sea! Después de tanto tiempo lo he vuelto a coger y estoy cambiando cosas y no hay manera. Mis amigos me lían de una manera espectacular, bueno, yo tampoco es que ponga demasiada resistencia la verdad.
Esta semana pasada ha sido tan agotadora que lo necesitaba pero también tengo que rematar el libro así que no sé que voy a hacer como siga haciendo buen tiempo y las ganas de quedarme frente al ordenador sean nulas. Prometo tener fuerza de voluntad, el fin de semana que viene. Me muero de la ilusión porque esté ya listo pero si alguno por aquí ha escrito un libro sabrá la dificultad y la súper rutina que tienes que tener. La disciplina es fundamental y la organización más.
Como os digo no he entrado en casa y el sábado estuve con unas amigas que me echaron ‘un poco de bronca’ no sé bien como llamarlo jajaja. Esta semana pasada en Instagram me solté un poco más la melena. Me aburre siempre decir en las noticias tal y tal y en el blog un nuevo look. Es práctico, rápido y ya… pero me apetecía mostrar mi faceta más desenfadada, sentirme con más libertad aunque también os digo que en mi trabajo intento ser todo lo profesional que puedo y lo que no me gusta intento no mostrarlo y con eso ya está solucionado. Pero se me fue un poco la cabecita e hice un poco de guasa.
Bueno en realidad no se me fue nada, yo soy así y quien me conoce sabe el humor que tengo. Me río de todo e intento minimizar los problemas. Siempre lo veo todo bien y no encuentro impedimento a nada, otra cosa es que luego se pueda o no. El caso es que puse que un desfile no me gustó y mil graciosidades más y me quedé en la gloria. Era divertido eso no lo niega nadie pero me han echado la charlita porque yo no puedo poner ese tipo de cosas. What??? Ya se lo dije a ellas… parece mentira que no me conozcáis, hago siempre lo que me da la gana y no me gusta tener que bailarle el agua a una marca cuando el desfile no me ha gustado. ¿O es que no os llama la atención que la gente que mira nunca se queje? Venga ya, no hay que ser hipócrita.
Es cierto y lo he dicho muchas veces que quizá la persona que cose, corta o mil cosas no tenga la culpa de cómo sea el resultado de lo que ha querido el director creativo y por eso me gusta tener siempre respeto porque lo que ves, es un equipo, no es sólo una persona pero venga ya, claro que hay cosas que no me gustan y no las saco pero no me negaréis que de vez en cuando dar un tirón de orejas es necesario. Porque el aplauso está muy bien pero la crítica si es constructiva y desde el cariño también vale muchísimo. Te hace crecen mucho más que un aplauso si cabe. Así que de vez en cuando se me seguirá yendo la cabeza y actuaré con naturalidad. Mis amigas obvio lo han entendido.
¿Y cómo es el look de hoy? Creo que se va a convertir en uno de mis favoritos esta primavera. Lo habréis visto mucho, esa es la faena de Zara pero puedes llevar esto de tantas y tantas maneras que cada uno le aporta su personalidad. Yo lo he combinado con unos jeans, zapatos de Mango al igual que la camisa, capazo de Maisons du Monde, manicura Le Petit Salon y anillo de una tienda de Sevilla. Me lo preguntáis mucho, es de un orfebre de allí que hace maravillas. Mil besos en el corazón, mañana más.
